Ya sea en una campaña o para tu e-commerce, hay un tipo de foto que agrada más a los clientes: estilo de vida.
Y para probarlo, realicemos un ejercicio.
Supongamos que has pensado en salir a acampar y en tus redes sociales aparece publicidad de botas, pero hay de dos tipos.
El primer anuncio tiene un fondo blanco y al hacer clic, notas que el sitio web sólo tiene fotos de las botas con dicho fondo. Tienen buen tamaño, buena resolución, la iluminación es correcta, pero no llega a más.
¿Cuál es la razón? Lo que la gente quiere es que despiertes en ella una emoción. Como en el segundo anuncio, que muestra a esas botas en acción con una persona caminando cerca de una cascada.
La audiencia quiere imágenes que despierten emociones
Tu imagen debe despertar una emoción, porque así la audiencia se sentirá identificada y tendrá el impulso de comprar dicho producto contigo y con nadie más.
No te centres en mostrar el producto, sino “cómo se vive” con ese artículo. La foto debe ser aspiracional y complementarse con artículos que no le roben el protagonismo.
Si vas a vender lentes, no los pones junto a un auto de lujo o a una consola de videojuegos, puedes incluir una idea de cómo usar el producto; quizá una computadora portátil con la pantalla apagada, para insinuar que los anteojos son especiales para proteger contra la luz de dispositivos.
Colocarlo junto a otros objetos permite al espectador “escalarlo” y darse una idea del tamaño real del producto, algo que siempre se agradece. Procura mostrar una persona interactuando con el artículo para darle realismo y permitirle conectar con tu audiencia.